Es un desequilibrio de la flora bacteriana intestinal que reduce la capacidad de absorción de nutrientes y provoca una falta de vitaminas. Este desequilibrio es causado por una disminución en la cantidad de bacterias buenas en el intestino y un aumento en las bacterias capaces de causar enfermedades.
Los principales síntomas de la disbiosis intestinal son:
• Náusea
• Gases
• Caída de cabello
• Uñas débiles
• Distensión abdominal
• Períodos alternos de diarrea y estreñimiento
• Heces malformadas
• Dolores de cabeza
• Cansancio
• Repetición de candidiasis.
Las Principales causas que llevan a esta alteración de la flora son:
• Baja ingesta de fruta y verdura
• Exceso de proteína animal
• Obesidad y Sobrepeso
• Baja ingesta de fibra
• Estrés
Mal uso de antibióticos: Todos sabemos que los antibióticos son maravillosos porque salvan vidas. Pero ¿los tomas cuando verdaderamente hace falta?, la alteración de la microbiota intestinal es uno de los principales problemas que ocasiona el mal uso de los antibióticos, pero no es el único, sino también la resistencia que nuestras bacterias generan hacia ellos. ¿Imaginas cómo las bacterias patógenas mutan en respuesta al uso indiscriminado de estos fármacos? Obviamente el paso a seguir puede ser de lo más letal con las infecciones que no pueden ser tratadas por falta de efectividad.
Sin embargo, debemos ser conscientes de que buena parte de las infecciones se pueden prevenir, y no solo mediante una correcta higiene, sino también con una alimentación saludable y unos buenos hábitos, que mantengan sana y fuerte a nuestra microbiota intestinal. Esto repercutirá positivamente sobre nuestra respuesta inmunológica y por tanto, tendremos menor riesgo de enfermar.
La buena noticia es que tiene cura! Se puede lograr mediante la reeducación dietética guiada por un nutricionista. Sin embargo, cuando la disbiosis no se trata, las bacterias malas pueden migrar a la sangre y provocar una infección en todo el cuerpo.
Es muy importante observar y conocer su cuerpo y al notar síntomas indeseables, buscar ayuda especializada y consumir productos natrales que no solo mejoren todos esos síntomas, sino que también te ayuden a curarlos paulatinamente, como lo es el ILIVIT.